Archivo Musical Santa Cruz de Mompox

Sobre cómo llegamos al archivo

En el marco de la investigación doctoral de María Alejandra De Ávila, la coautora del presente trabajo requirió documentos musicales del siglo XIX y principios del XX, lo que la condujo al rastreo de partituras del Caribe colombiano. Al inicio esta tarea fue desesperanzadora, pues, como se dijo, los repositorios de esta naturaleza son escasos, o no están organizados para su consulta. Así que, en la búsqueda bibliográfica y hemerográfica, tuvo a bien conocer el libro Mompox y su cultura musical. Una visión histórica y social 1540-1993 del momposino Jesús Zapata Obregón. Dicho libro no estaba disponible en línea y su adquisición física era igualmente difícil, sin embargo, en la red encontró algunas datos del autor. En una entrevista, Zapata dio luz sobre la existencia de manuscritos musicales de finales del XIX en Mompox, así se logró obtener un primer indicio de un conjunto de papeles de música con estas características. De este modo, toda la información llevó a la investigadora a contactarlo, gracias a la ayuda de colegas que proporcionaron información2. De tal manera, pudo conversar con él desde Ciudad de México hasta Magangué, lugar donde ha radicado el investigador y Miembro de Número de la Academia de Historia de Mompox. Desde ese momento, se inició una amistad, así como un largo y rico diálogo de saberes que hasta la fecha sigue rindiendo frutos.

Imagen 2. Exploración inicial, evaluación y reconocimiento de papeles

Ahora bien, María Alejandra le explicó sus intereses académicos y la necesidad de adquirir su libro, Zapata solidariamente no dudó en hacérselo llegar. Pasado los días, le comentó el interés de visitar el archivo musical junto con el coautor del presente catálogo. Fue así que nos contactó con el director del Archivo Histórico de Mompox, Luis Alfredo Domínguez Hazbún, y con la doctora Cruz María Campo, quien preside la Academia de Historia de Mompox en la actualidad. Gracias a esta ayuda pudimos agendar la visita al archivo el mes de abril del año 2019 en vísperas de Semana Santa, esta decisión fue determinante para entender la importancia del género musical marcha en el pueblo. Así, llegó el día esperado en el cual nos permitieron observar el archivo que, en ese entonces, estaba empolvado, muy desordenado y guardado en cajas viejas; las partituras se encontraban resguardadas en folders de cartón, además, muchas de ellas dañadas por el comején. No obstante, lo más grave –para nuestros intereses– era que no tenía un orden adecuado para la investigación, ni mucho menos un catálogo de consulta, lo que lo convertía en un cúmulo de papeles y no un archivo de consulta como tal3.

Imagen 3. Papeles en cajas y fólderes en estado original, antes de ser clasificados

Al siguiente día, reflexionamos que para poder obtener la información para la investigación teníamos que darle un orden a los papeles. Por tal razón, determinamos conformar un plan de trabajo especializado conforme a la metodología de clasificación y catalogación de archivos musicales para banda y orquesta que ha desarrollado Leopoldo Flores Valenzuela junto con colegas en Oaxaca, México (Navarrete, Flores y Serralde 2017; 2017b). De este modo, gestionamos los permisos requeridos con las personas, autoridades e instituciones vinculadas al repositorio y, entonces, se aplicó dicha metodología. Ésta consiste, grosso modo, en la limpieza, clasificación, digitalización y catalogación de todos los papeles de música, lo cual dio por resultado el actual AMSCM. La primera fase, en campo, se realizó en dos estancias, las cuales tuvieron lugar en abril (clasificación) y junio (digitalización) de 2019. La segunda corresponde con el trabajo de escritorio, que dio como resultado el catálogo y análisis del trabajo que hoy compartimos con ustedes.

2 Agradecemos a Diana Carmona Nobles de Montería y a Enrique Muñoz Vélez de Cartagena por la ayuda brindada.

3 Hay que reconocer el valioso trabajo que realizó la directora del archivo hasta el 2009, Cecilia Jiménez Acuña, quien logró darle cierto orden y, en guardas de papel bond, anotar los títulos, géneros y compositores, además de realizar listados de las obras.

Sobre cómo llegamos al archivo